"Al principio, no existían los seres humanos tales como los conocemos ahora.
Hombres y mujeres eran un solo cuerpo, cuya cabeza tenía 2 caras mirando en direcciones opuestas, cuatro brazos, cuatro piernas, 2 sexos opuestos.
Los dioses griegos, celosos, vieron que una criatura que tenía 2 caras estaba siempre vigilante, 4 piernas hacían fácil sostenerse o andar por largos períodos de tiempo sin cansancio. Y, lo más peligroso, como la criatura tenía 2 sexos opuestos, no necesitaba de nadie ni de nada más para reproducirse sobre la Tierra.
Entonces, el dios Zeus, señor del Olimpo, dijo: "Tengo un plan para hacer que los mortales sobre la tierra pierdan su fuerza".
Y con uno de sus rayos, partió a la criatura por la mitad, creando así al hombre y a la mujer, lo que los desorientó y debilitó mucho.
Así es como en nuestros días, vamos por el mundo buscando a nuestra parte perdida, abrazarla de nuevo, y, en ese abrazo, recuperar la antigua figura y la capacidad para evitar la traición."
De: 11 minutos - Paulo Coelho.
Hombres y mujeres eran un solo cuerpo, cuya cabeza tenía 2 caras mirando en direcciones opuestas, cuatro brazos, cuatro piernas, 2 sexos opuestos.
Los dioses griegos, celosos, vieron que una criatura que tenía 2 caras estaba siempre vigilante, 4 piernas hacían fácil sostenerse o andar por largos períodos de tiempo sin cansancio. Y, lo más peligroso, como la criatura tenía 2 sexos opuestos, no necesitaba de nadie ni de nada más para reproducirse sobre la Tierra.
Entonces, el dios Zeus, señor del Olimpo, dijo: "Tengo un plan para hacer que los mortales sobre la tierra pierdan su fuerza".
Y con uno de sus rayos, partió a la criatura por la mitad, creando así al hombre y a la mujer, lo que los desorientó y debilitó mucho.
Así es como en nuestros días, vamos por el mundo buscando a nuestra parte perdida, abrazarla de nuevo, y, en ese abrazo, recuperar la antigua figura y la capacidad para evitar la traición."
De: 11 minutos - Paulo Coelho.