[img]Cruzara pura brazada el Estrecho de Gibraltar es uno de los máximos desafíos
de las aguas abiertas a nivel internacional y que, en los últimos
ochenta años, sólo lo lograron unos 183 valientes de los cuales siete
son argentinos. A partir del 18 de septiembre, los nombres de los
nadadores bonaerenses Pedro y Martín Rosso quedaron inscriptos en ese
selecto grupo tras convertirse en el primer padre e hijo que completan
juntos los veintidós kilómetros que separan la costa española de
Tarifa, al sur de Europa, de la playa marroquí de Punta Cires al norte
de África.[/size]
Tras sobreponerse a las bajas temperaturas que llegaron a ser de cinco grados menos que los veintiuno previstos para esta época del año, el joven escualo de diecisiete años no aflojó en ningún momento hasta pisar tierra firme cuando el conómetro marca que habían transcurrido 4 horas y 33 minutos desde que se zambulló en el Mar Mediterráneo hasta finalizar en el Océano Atlántico. Unos 34 minutos después, en exactas 5 horas y 7 minutos, emergío el papá de la criatura e impulsor de este proyecto inspirado en las hazañas de Patricio D’ottavio; María Inés Matto; Luis Marceca y Pablo Cosso, embajadores criollos que en esta última década unieron el viejo mundo con el contienente negro. http://www.eldepornauta.com.ar/noticias.php?idNoticia=2789[/img]