Una mujer paseaba por un parque con su marido cuando encontró una rana en una trampa. La rana le dijo:
- "Si me liberas de esta trampa, te concederé tres deseos."
La mujer liberó a la rana y ésta le dijo:
- "Gracias, pero no te mencioné que había una condición a tus deseos: cualquier cosa que tú desees, a tu marido se le concede 10 veces más o mejor que a ti."
El marido comenzó a sonreirse. La mujer lo aceptó. Como primer deseo, ella quiso ser la mujer más bella en el mundo.
La rana le advirtió:
- "¿Te das cuenta que ese deseo también hará que tu marido sea el hombre más guapo y deseable del mundo, un Adonis a quien todas las mujeres adorarán?"
La mujer contestó:
- "Eso no tiene importancia, porque yo seré la mujer más hermosa y él sólo tendrá ojos para mí."
Así que se contirtió en la más bella del mundo.
Como segundo deseo ella quiso tener 15 millones de dólares. La rana le dijo:
- "Eso hará que tu esposo sea diez veces más rico que tú."
La mujer le dijo:
- "Está bien, porque lo que es mío es suyo, y lo suyo es mío."
Asi que ambos fueron ricos. El marido se reía con sus ciento cincuenta millones porque era mucho más rico que ella.
La rana le preguntó por su tercer deseo y ella contestó:
- "Quisiera que me diera un infarto chiquitiiiiito"
y desde ese día... es bella, millonaria y viuda.
MORALEJA: Las mujeres son demasiado listas, no las provoquen....