Cuantas veces soñe con este hombre,este hombre extraño y divino que con sus ojos miraba la luna y la luna miraba los mios.
Cuantas veces miré ese altar, ese altar de esperanza y pasion, que en susurros pequeños explica la grandeza de su amor.
Cuantas veces pedí por él en las noches calladas de invierno, pero él nunca escucho mis palabras porque era sordo al viento.
Ahora estoy sentada aqui, esperando su regreso y si vuelve y golpea a mi puerta le abrire en un calido y hermoso beso.
Cuantas veces miré ese altar, ese altar de esperanza y pasion, que en susurros pequeños explica la grandeza de su amor.
Cuantas veces pedí por él en las noches calladas de invierno, pero él nunca escucho mis palabras porque era sordo al viento.
Ahora estoy sentada aqui, esperando su regreso y si vuelve y golpea a mi puerta le abrire en un calido y hermoso beso.